Hoy me he dado cuenta que las cosas cambian. Y cambian para terminar. Se van modificando poco a poco, mientras sus dueños las envuelven en azúcar para hacértelas tragar. El problema viene cuando no te gusta el dulce. Y la confirmación se define cuando haces pruebas, una detrás de otra, y obtienes el resultado esperado. Es decir, no funcionará.
Lo que antes era A, ahora es A-1, y así sucesivamente. Y yo paso. Vamos que no. Que no me veo. De las cosas que me considero, cuidadoso es una de ellas. Y lo he dicho muchas veces: tengo una especie de don para ver más allá de las cosas y personas. Sobre todo personas. Cuando alguien viene yo ya me he dado 3 paseos y me he sentado a esperar. Es bueno y es malo. Bueno porque sufres menos de lo habitual. Malo porque sufres antes de lo habitual. Pero no me cambiaría por nadie en general. En ocasiones con fecha de caducidad sí, pero poco más que eso.
Estaba buscando la definición exacta de “Idealista”, pero me quedo con eso de “Es la actitud del filósofo que no se conforma con lo que en apariencia hay”. Sí. Quizá siempre pienso que hay algo más allá. Y lo mismo con las personas. Pero éstas me decepcionan más que las cosas. Curioso, no?. Quizá es culpa mía por dejar que se crean que van por delante. Creo que es porque me gusta el proceso de ver la caza desde lejos. Serán mis "genes depredadores". Siempre he estado más cerca de los leones que de los ciervos. Al menos sus actividades son más interesantes durante un tiempo.
Cuando el interés finaliza en carne, siempre sobran piezas y hambre.
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