Ir al contenido principal

LA NOCHE QUE EL ´99 LLEGO HASTA ABRIL

Llevo un par de meses con sensaciones raras. O que a mí me parecen raras. Se me escapa el tiempo, los días, las horas y los miles de segundos.  Todo va cuesta abajo y cada vez de forma más vertiginosa. Es como si se me hiciera tarde constantemente. El mundo intenta arrastrarme a esa línea de la vida que coge todo el mundo y que yo he evitado siempre.  Últimamente tiro de recuerdos más de lo habitual y eso que mi vida ha funcionado siempre con la gasolina del pasado: pocos y selectos recuerdos cogidos con pinzas que me han permitido salir adelante en más de una ocasión. La magia de algunas situaciones ha sido tan maravillosa e intensa que he podido vivir de las rentas emocionales sin pensar demasiado en el futuro,  siempre negro y lluvioso como la última escena de Casablanca.
No sé si es que no me conformo con lo que tengo. Creo que no es eso. Sí es cierto que lo que me mantiene vivo es ese hambre feroz que siempre he tenido por cosas nuevas: personas, música, libros, lugares, sensaciones… Pero es que creo que la vida sin todo eso sería una mierda. Hay cosas tan pequeñas que te hacen ser tan grande… Y personas que te cambian la vida para siempre, aunque su contacto haya durado pocas horas o segundos.  Personas de las que me alimento emocional e intelectualmente y que tengo acomodadas en las mejores habitaciones de mi memoria. Y la suite principal la tiene ocupada de forma permanente alguien que en unos días será un alguien más… ella.  Así que en vez de dejar una cesta de fruta como despedida, le dejaré una nota:
foto0499
A ti, que apareciste en mi vida de la mano de un camarero y unos píxeles. Que me has acompañado tantas noches y algunos amaneceres en los que los relojes se quedaron sin agujas. A ti, cuyas neuronas se reconocieron con las mías de una forma incrédula que daba miedo. A ti, que me entendiste a la primera eso de estar solo rodeado de gente…
Contigo que he sido el tío más hijo de puta del mundo exprimiendo mentes mediocres sin ningún remordimiento. Juntos destapamos capas de la cebolla y luego las colocamos en su sitio como si nada hubiera pasado. Para que nadie se diera cuenta. Contigo sentí el efecto lepidóptero rabioso cuando te marchaste a algún lugar del globo terráqueo  pero muy largo de mí y me hiciste sentir orgulloso cuando me contabas que eras feliz en el mundo que tú habías elegido.
Porque la madrugada antes de volar,  yo tenía en el msn la cabecera “Bailando bajo la nieve” y te cambiaste la tuya a “Bailando también bajo la nieve”. Porque en todos mis pc´s siempre ha habido una carpeta con tu nombre y tus tesoros, que de vez en cuando miro y disfruto despacito y a solas, porque es como tenerte a la misma distancia de siempre. Porque no sé realmente cuánto tiempo hace que nos conocemos, pero todos los días me llega algo que asocio a ti. Porque desde que me regalaste “Hyuman” (como solías decir) es lo que me despierta cada mañana a las horas en las que tú te acuestas.
Tú y yo tenemos claro que la inteligencia sola aplasta. El amor solo es ineficaz. Lo nuestro es  inteligente, laborioso y técnico. Y pensar que no somos ni  somos todo eso y algo más.
amantes ni novios ni amigos ni conocidos ni familia, y sin embargo“Rompí a llorar. Me encanta esa expresión.
No se dice rompí a comer o rompí a caminar.
Rompes a llorar o a reír. Creo que vale la pena
hacerse añicos por esos sentimientos.”
Albert Espinosa

Comentarios

Popular Posts

Abroad on nowhere

Normalmente no me importan los cumpleaños. Creo que la última vez que noté que cumplia un año más, fue cuando cumplí 15 años o algo así, y me di cuenta que las cosas son jodidamente caras (no-yay). En mi cabeza sigo siendo un niño inocente de 18 años que está confundido por todo (en serio, ¿qué es todo esto?). Pero en su mayor parte, he estado funcionando en piloto automático durante casi 10 años. Mi cumpleaños esta semana no solo fue una alarmante llamada de atención, sino que fue totalmente surrealista dado que en lugar de celebrar el hito desalentador en un restaurante a un precio razonable con amigos y familiares, o preparar algo delicioso en casa, estaba sentado solo en una habitación bebiendo varias bebidas (probablemente cuestionables o simplemente agua). Mientras mantenia una videollamada con una persona que la verdad no esperaba siquiera recordase que era mi cumpleaños. Recuerdo cuando un año solía sentirse como toda una vida; ahora parecen pasar rápidamente en un abrir y ...

Mi otro Yo, Yo e ¿Irene?

Antes que nada dadle Play, al vídeo que acompaña está cosa poco elaborada que utilizo para desempolvar está cloaca, y disfruta de la hermosa animación del mismo. Mi otro Yo Un tipo tranquilo, fácil de llevar, alguien que ofrece su ayuda a otros, amable con las personas esto hasta cierto punto incluye aquellas que para las demás personas no merecen este trato, y que por ser la antitesis de mi YO, no podria forjar una buena relación con ellas. Yo No soporta las personas, desea obtener lo mínimo posible de ellas, respeto, consideración, cariño, aprecio son cosas innecesarias para quien esté fuera de mi zona de confort de personas apreciadas. Para el que no me conoce, este YO es tan difícil de lidiar, que se sorprenden al ver que le encanta deshacer y destruir todo lo que "Mi otro Yo" construye. Y no es que posea síndrome de personalidad múltiple o algo parecido, como en la película que da nombre a este post, simplemente es la construcción del 50...

Twits no tan serios de la noche que el '99 llegó hasta a Abril

Está entrada lleva un tanto de tiempo en querer ser publicada por lo que no pidaís mucha coherencia con lo acá escrito... Su mera existencia es banal y solo existe para desempolvar la cloaca que es mi blog. Son pensamientos desgranados sobre cosas o momentos de las últimas semanas, meses o años, algunos sobre el mismo evento, otros algún momento vulgar del día a día. Ha venido una señora amiga de mi madre y de la nada me ha pedido que le ayude con la tarea de su ¿¿Nieto?? un recetario de platillos propios del país. Me he emputado porque yo, ni en mis tiempos de estudiante hacia mis tareas, ¿porqué habria de hacer tarea ajena? Entre ellos me ha pedido el guacamole. Mientras buscaba imágenes, solo reconfirme una cosa y es que odio con todo mi ser los aguacates, en serio me parece asquerosa esa combinación de tonos amarillos y verdes. Y en guacamole multiplicar a la enésima potencia el asco que me provoca. Desde la ventana de la sala de espera pude ver como la persiana de una perfumería e...